La pandemia del coronavirus que aqueja a todo el mundo ha afectado en su gran mayoría a personas con sistemas inmunológicos debilitados, especialmente a los ancianos.
En Israel, donde se tomaron medidas preventivas drásticas y tempranas, como el cierre de su espacio aéreo y estrictas regulaciones de distanciamiento social, el número de personas mayores infectadas por el mortal virus llegó aproximadamente al 20% del total de contagiados. No obstante, el número de ancianos que falleció como consecuencia del virus es mucho más elevado (poco más de un tercio de las víctimas totales fueron residentes de hogares y centros de asistencia de ancianos).
En Keren Hayesod estamos comprometidos con asegurar que los ancianos residentes de Amigour estén adecuadamente asistidos durante la pandemia. Es responsabilidad de todos asegurarles la atención necesaria para una vida de salud y de cuidado.
Hoy en día, más de 7,500 ancianos de bajos recursos, que en su mayoría son inmigrantes de la ex Unión Soviética y sobrevivientes del holocausto, gozan de los beneficios de una vejez independiente y digna en viviendas asequibles que Amigour pone a su disposición en complejos residenciales en todo el país. Sin los servicios que les brinda Amigour, estos ancianos no tendrían donde vivir ni quien los asista dignamente durante el resto de sus vidas.
Desde el estallido del coronavirus en Israel, el Ministerio de Salud Pública impuso estrictas regulaciones especialmente para los ancianos quienes son población de riesgo. En vez de poder disfrutar de variadas actividades que estimulan el intelecto y la interacción social, cada residente se vio obligado a confinarse entre las cuatro paredes de un pequeño departamento. La mayoría de ellos carece del respaldo de un sistema de contención y apoyo que en situaciones como éstas pueden brindarle familiares y amigos. Solo el personal de Amigour está pudiendo satisfacer sus necesidades más básicas, como abastecerlos de alimentos, productos de aseo y protección. Por lo tanto, es fundamental asegurar el normal y continuo funcionamiento de Amigour, a fin de brindarle a los ancianos residentes la mejor calidad de vida que tanto necesitan y merecen en las actuales circunstancias.
Una donación por US$ 180 posibilita el suministro de canastas de alimentos básicos, materiales sanitarios y productos de higiene personal, como también la organización de actividades sociales y culturales posibles durante el confinamiento para los residentes de Amigour y así atenuar la sensación de soledad y aislamiento que estos padecen.
Es nuestra obligación asegurar una vida saludable y digna a nuestros ciudadanos ancianos.
¡Únete a nosotros, tu ayuda es necesaria!
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