Esta historia dio la vuelta al mundo, tras lo cual quedó demostrado que el bien y la tolerancia se imponen.
Durante el mes de noviembre 2019 se realizó en Munich una subasta pública en donde se ofrecieron artículos personales de Adolf Hitler y otros jerarcas Nazis.
Abdallah Chatila, un empresario suizo-libanés decidió comprar estos artículos pagando una cifra de aproximadamente 600,000 euros para evitar que estos lleguen a manos de personas antisemitas.
El señor Chatila es cristiano y hoy vive en Ginebra, Suiza. Al adquirir estos objetos, se puso en contacto con Keren Hayesod ya que tenía conocimiento de que esta es una institución relacionada formalmente con Israel y el pueblo Judío y pensó que la entidad sabría mejor qué hacer con los objetos comprados.
Keren Hayesod recibió los artículos y después de consultarlo con varios organismos relevantes, decidió donarlos a Yad Vashem (Centro mundial para el recuerdo del Holocausto), ya que son la mejor fuente de educación y documentación sobre la Shoá. Ellos se comprometieron a someterlos a análisis, cuidarlos e incorporarlos como parte de su colección privada.
Como agradecimiento a este hermoso acto de paz y tolerancia, se invitó al Sr. Chatila a visitar Israel, donde Keren Hayesod fue el encargado de organizar y acompañarlo en su viaje.
Keren Hayesod recibió al Sr. Abdallah Chatila en Israel
“Usted ha tomado un capítulo muy oscuro en la historia judía y de la humanidad y arrojó luz sobre él al promover la tolerancia y la esperanza”– señaló el Sr. Sam Grundwerg, presidente de Keren Hayesod Mundial
Keren Hayesod se siente honrado de haber sido parte de esta historia desde el principio, haber ayudado a transferir los artículos a Yad Vashem y haber hospedado al Sr. Chatila durante su visita especial a Israel, donde lo llevaron a conocer al presidente de Israel y visitar los proyectos del Keren Hayesod.